- marzo 2014 ~ AFA "Sierra Mágina"

lunes, 10 de marzo de 2014

La vacuna contra el Alzheimer comienza a ensayarse en humanos

El ensayo clínico en humanos de la vacuna contra el Alzheimer en la que trabaja la empresa Araclon Biotech ya ha empezado este mes de enero con los primeros cinco pacientes y sin que se detecte, de momento, "ningún efecto adverso". Tras la exitosa fase de experimentación animal, la Agencia Española del Medicamento autorizó en septiembre de 2013 las pruebas en personas. En esta fase I, de carácter muy preliminar, se evalúa especialmente la tolerabilidad y la seguridad de la vacuna ABvac40 en enfermos con Alzheimer leve o moderado, si bien no se analiza su efectividad. Su desarrollo se basa en la inmunización contra el beta-amiloide y se trata de una innovadora inmunoterapia activa específica frente a las proteínas beta-amiloides 40 y 42, utilizando la parte C-terminal de estas proteínas.
El ensayo clínico de fase I está coordinado por la Fundació ACE, se realiza en Barcelona bajo la supervisión de la doctora Mercé Boada, y es un estudio ciego sobre un total de 24 personas: 16 pacientes diagnosticados y en estadio leve y ocho pacientes que reciben placebo. Está previsto que finalice en 2015.
Sarasa ha remarcado que los resultados de esta fase "no los sabremos hasta el año que viene, cuando hayan pasado todos los pacientes. Ahora lo único que sabemos es que no ha habido ningún efecto adverso, que es lo importante", pero no conocen otros detalles de las pruebas. Una vez que se conozcan los resultados se iniciará una segunda fase, para analizar su funcionamiento, "si se ha estimulado el sistema inmunitario" de los pacientes o no, y aplicar distintas dosis, si bien "eso lo sabremos en año y medio", ha recalcado.
Araclon Biotech también trabaja, entre otros proyectos, en la validación de un kit de diagnóstico temprano (ABtest') de la enfermedad de Alzheimer, basado en la detección de las fracciones del péptido beta-amiloide 17, 40 y 42, las tres con mayor presencia en sangre, que podrían ser consideradas como potenciales biomarcadores para el diagnóstico preclínico de la enfermedad. Actualmente tiene en marcha diversos estudios, en colaboración con grupos de investigación de todo el mundo, en los que participan más de mil individuos con el objetivo de disponer de datos que permitan validar los kits basados en técnicas de ELISA.
https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg2D85JP-7D6fZZ4vIBmseTBzEQHCBTRpwIcNJvPmsCPECZ8YJvG2wh6o3C7H_5FLrMKUUx0ARB3R9wjCi0AqhgRv3wFImVAmSUNROpSmJoBtanDX-ogHjWyxncx4HuB2pcaLJ7jyWgSIk/s1600/image_content_medium_1578058_20140226143033.jpg
"Veremos cuándo" se pueden presentar, aunque "eso lo dirán las autoridades sanitarias", por lo que "no puede decir fechas. La investigación lleva sus tiempos, ya me gustaría al día siguiente que hago el diseño saber los resultados", ha reiterado. Asimismo, la compañía Grifols --propietaria del 51 por ciento de Araclon Biotech-- dirige, con la coordinación de la doctora Mercé Boada, el proyecto AMBAR que ensaya la terapia combinada de recambio plasmático y la reposición con albúmina en diferentes dosis. En el estudio participan 365 enfermos en estadio leve-moderado y se han adherido 17 hospitales españoles y 20 de EE.UU.
Grifols ha coincidido en que la investigación "es lenta, difícil" y sus resultados se comprueban "de aquí a veinte años" y, por ello, el trabajo que desarrollan en los centros "está infravalorado", a pesar de ser esencial.

Apoyo institucional

Respecto al apoyo de las instituciones al desarrollo de estos proyectos, la presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, ha apuntado que el Ejecutivo aragonés es consciente de la importancia que tiene la inversión en investigación. "A pesar de que los tiempos que vivimos no lo ponen fácil, tienen mi compromiso de que seguiremos trabajando en su apoyo" ha garantizado, para apreciar que este esfuerzo debe realizarse desde lo público y contando "con el sector privado".
El alcalde Juan Alberto Belloch ha considerado que, desde la administración, "sí somos sensibles" a esta enfermedad que afecta a unas 800.000 personas en España, a uno de cada diez mayores de 65 años, y ha asegurado que el consistorio "está dispuesto a implantar planes de ayuda para las familias", algo que desea estudiar con el Ejecutivo aragonés. 
 

Ácidos grasos omega 3 protegerían de la pérdida de neuronas





https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjXF8Tfdzb292sQW8rm2tdJzoUdTpZZbXY-RQffYgyU-1DiZiBxc4DM4fsypymMPn4pOUQoKxOf81dVTWAad33eoA9Cefpf6uCk7nAsUI2lchjgz6Eoyx_wwMKbB-HdVstkjwir0SabETw/s1600/th.jpg

Mientras más ácidos grasos omega 3 de los que se hallan en el pescado se consumen, menos probable es que se pierdan valiosas neuronas a medida que se envejece. En un estudio aparecido en la revista Neurology, los investigadores han evaluado los niveles de ácidos grasos omega 3, en concreto ácido eicosapentanoico (EPA) y ácido docosahexaenoico (DHA), en la sangre de 1.111 mujeres posmenopáusicas, con una edad media de 78 años. Ocho años después, las mujeres se sometieron a pruebas de resonancia magnética para medir su volumen cerebral.
Las participantes cuyos niveles sanguíneos de ácidos grasos omega 3 eran el doble de elevados tenían un volumen cerebral un 0,7% mayor (p = 0,048). Los resultados sugieren que el efecto sobre el volumen cerebral es equivalente a retrasar la pérdida normal de neuronas que conlleva el envejecimiento en uno o dos años. Niveles más altos de dichos ácidos grasos también se asociaron con un mayor volumen en el hipocampo, la primera región del cerebro afectada por la enfermedad de Alzheimer.
[Neurology 2014]
Pottala JV, Yaffe K, Robinson JG, Espeland MA, Wallace R, Harris WS
 
 
Fuente: Alzheimer Andalucía
 

Esperanza para tratar Alzheimer tras exitosa experiencia con ratones

Si bien estos resultados todavía están muy distantes de una posible aplicación en seres humanos, podrían ser una nueva estrategia de lucha para el futuro contra esta enfermedad y el Parkinson


Científicos anunciaron el jueves el descubrimiento de un compuesto químico que, en ratones, bloquea enfermedades producidas por priones, lo que podría representar una nueva forma terapéutica para la enfermedad de Alzheimer y el Parkinson.
Estos resultados obtenidos por investigadores británicos distan mucho de una posible aplicación en seres humanos, pero podrían ser una nueva estrategia de lucha contra las enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer y el Parkinson, que comparten mecanismos comunes de las enfermedades producidas por priones.
Las enfermedades producidas por priones, agentes infecciosos constituidos exclusivamente por proteínas, generan alteraciones neurodegenerativas contagiosas, como la encefalopatía espongiforme bovina en animales, más conocida como enfermedad de las vacas locas, o la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob en humanos.
Según el artículo publicado en la revista American Science Translational Medicine, este compuesto químico administrado a ratones logró bloquear los daños en el cerebro causados por una enfermedad producida por priones, implicando un mecanismo de defensa celular natural.
“Todavía estamos lejos de un medicamento para humanos ” , dijo Giovanna Mallucci, principal responsable de la investigación realizada en la Universidad de Leicester, quien destacó que el producto químico en cuestión “ tiene efectos secundarios graves ” .
“Pero el hecho de haber establecido que este mecanismo puede utilizarse para evitar la pérdida de células del cerebro (...) significa que hay una oportunidad real de desarrollar tratamientos contra las enfermedades producidas por priones y otras enfermedades neurodegenerativas ” , dijo la doctora Mallucci a la agencia de noticias británica Press Association.
El compuesto, conocido por su nombre de laboratorio GSK2606414 (producido por la compañía farmacéutica británica GlaxoSmithKline) , fue probado en 29 ratones infectados con priones, que causan encefalopatías.
Los animales fueron comparados con un grupo control con ratones cuyos cerebros también habían sido infectados con priones pero no recibieron el compuesto.
Los ratones tratados siete semanas después de la infección con priones no sufrieron pérdidas de memoria en una prueba para reconocer un objeto familiar, mientras que aquellos tratados nueve semanas después de la infección mostraron un deterioro de la memoria.
El examen de los cerebros de los ratones confirmó la debilidad del daño cerebral en aquellos tratados siete semanas después de la infección por priones.
En un comentario de científicos ajenos al estudio, publicado por la revista, los especialistas en neurociencia Wiep Scheper y Jeroen Hoozemans, de la Universidad Libre de Amsterdam, sugieren que esta investigación podría abrir “ una nueva estrategia terapéutica”.
Pero piden prudencia, porque los ratones son modelos limitados para las enfermedades del cerebro humano y también debido a que el producto químico utilizado tiene efectos secundarios sobre el páncreas, desarrolla diabetes y produce pérdida de peso.

Fuente: http://www.elpais.com.uy/vida-actual/esperanza-tratar-alzheimer-exitosa-experiencia-ratones.html
Científicos anunciaron el jueves el descubrimiento de un compuesto químico que, en ratones, bloquea enfermedades producidas por priones, lo que podría representar una nueva forma terapéutica para la enfermedad de Alzheimer y el Parkinson. Estos resultados obtenidos por investigadores británicos distan mucho de una posible aplicación en seres humanos, pero podrían ser una nueva estrategia de lucha contra las enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer y el Parkinson, que comparten mecanismos comunes de las enfermedades producidas por priones. Las enfermedades producidas por priones, agentes infecciosos constituidos exclusivamente por proteínas, generan alteraciones neurodegenerativas contagiosas, como la encefalopatía espongiforme bovina en animales, más conocida como enfermedad de las vacas locas, o la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob en humanos. Según el artículo publicado en la revista American Science Translational Medicine, este compuesto químico administrado a ratones logró bloquear los daños en el cerebro causados por una enfermedad producida por priones, implicando un mecanismo de defensa celular natural. “Todavía estamos lejos de un medicamento para humanos ” , dijo Giovanna Mallucci, principal responsable de la investigación realizada en la Universidad de Leicester, quien destacó que el producto químico en cuestión “ tiene efectos secundarios graves ” . “Pero el hecho de haber establecido que este mecanismo puede utilizarse para evitar la pérdida de células del cerebro (...) significa que hay una oportunidad real de desarrollar tratamientos contra las enfermedades producidas por priones y otras enfermedades neurodegenerativas ” , dijo la doctora Mallucci a la agencia de noticias británica Press Association. El compuesto, conocido por su nombre de laboratorio GSK2606414 (producido por la compañía farmacéutica británica GlaxoSmithKline) , fue probado en 29 ratones infectados con priones, que causan encefalopatías. Los animales fueron comparados con un grupo control con ratones cuyos cerebros también habían sido infectados con priones pero no recibieron el compuesto. Los ratones tratados siete semanas después de la infección con priones no sufrieron pérdidas de memoria en una prueba para reconocer un objeto familiar, mientras que aquellos tratados nueve semanas después de la infección mostraron un deterioro de la memoria. El examen de los cerebros de los ratones confirmó la debilidad del daño cerebral en aquellos tratados siete semanas después de la infección por priones. En un comentario de científicos ajenos al estudio, publicado por la revista, los especialistas en neurociencia Wiep Scheper y Jeroen Hoozemans, de la Universidad Libre de Amsterdam, sugieren que esta investigación podría abrir “ una nueva estrategia terapéutica”. Pero piden prudencia, porque los ratones son modelos limitados para las enfermedades del cerebro humano y también debido a que el producto químico utilizado tiene efectos secundarios sobre el páncreas, desarrolla diabetes y produce pérdida de peso

Este contenido ha sido publicado originalmente por Diario EL COMERCIO en la siguiente dirección: http://www.elcomercio.com/tecnologia/ciencia/salud-ciencia-Parkinson-Alzheimer-ratones-enfermedades-tratamientos-descubrimiento_0_1008499305.html. Si está pensando en hacer uso del mismo, por favor, cite la fuente y haga un enlace hacia la nota original de donde usted ha tomado este contenido. ElComercio.com
Científicos anunciaron el jueves el descubrimiento de un compuesto químico que, en ratones, bloquea enfermedades producidas por priones, lo que podría representar una nueva forma terapéutica para la enfermedad de Alzheimer y el Parkinson. Estos resultados obtenidos por investigadores británicos distan mucho de una posible aplicación en seres humanos, pero podrían ser una nueva estrategia de lucha contra las enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer y el Parkinson, que comparten mecanismos comunes de las enfermedades producidas por priones. Las enfermedades producidas por priones, agentes infecciosos constituidos exclusivamente por proteínas, generan alteraciones neurodegenerativas contagiosas, como la encefalopatía espongiforme bovina en animales, más conocida como enfermedad de las vacas locas, o la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob en humanos. Según el artículo publicado en la revista American Science Translational Medicine, este compuesto químico administrado a ratones logró bloquear los daños en el cerebro causados por una enfermedad producida por priones, implicando un mecanismo de defensa celular natural. “Todavía estamos lejos de un medicamento para humanos ” , dijo Giovanna Mallucci, principal responsable de la investigación realizada en la Universidad de Leicester, quien destacó que el producto químico en cuestión “ tiene efectos secundarios graves ” . “Pero el hecho de haber establecido que este mecanismo puede utilizarse para evitar la pérdida de células del cerebro (...) significa que hay una oportunidad real de desarrollar tratamientos contra las enfermedades producidas por priones y otras enfermedades neurodegenerativas ” , dijo la doctora Mallucci a la agencia de noticias británica Press Association. El compuesto, conocido por su nombre de laboratorio GSK2606414 (producido por la compañía farmacéutica británica GlaxoSmithKline) , fue probado en 29 ratones infectados con priones, que causan encefalopatías. Los animales fueron comparados con un grupo control con ratones cuyos cerebros también habían sido infectados con priones pero no recibieron el compuesto. Los ratones tratados siete semanas después de la infección con priones no sufrieron pérdidas de memoria en una prueba para reconocer un objeto familiar, mientras que aquellos tratados nueve semanas después de la infección mostraron un deterioro de la memoria. El examen de los cerebros de los ratones confirmó la debilidad del daño cerebral en aquellos tratados siete semanas después de la infección por priones. En un comentario de científicos ajenos al estudio, publicado por la revista, los especialistas en neurociencia Wiep Scheper y Jeroen Hoozemans, de la Universidad Libre de Amsterdam, sugieren que esta investigación podría abrir “ una nueva estrategia terapéutica”. Pero piden prudencia, porque los ratones son modelos limitados para las enfermedades del cerebro humano y también debido a que el producto químico utilizado tiene efectos secundarios sobre el páncreas, desarrolla diabetes y produce pérdida de peso.

Este contenido ha sido publicado originalmente por Diario EL COMERCIO en la siguiente dirección: http://www.elcomercio.com/tecnologia/ciencia/salud-ciencia-Parkinson-Alzheimer-ratones-enfermedades-tratamientos-descubrimiento_0_1008499305.html. Si está pensando en hacer uso del mismo, por favor, cite la fuente y haga un enlace hacia la nota original de donde usted ha tomado este contenido. ElComercio.com

Un documental revela poder terapeútico de la música contra el alzhéimer

Aunque no tiene el poder de curar la demencia o la enfermedad de Alzheimer, la música puede ayudar a los enfermos a “despertar” sus recuerdos, según reveló un documental presentado en el Festival de cine de Sundance en Estados Unidos.

“Alive Inside: A Story of Music and Memory” (“Vivo por dentro: una historia de la música y la memoria”) , el primer largometraje de Michael Rossato-Bennett, está en competición en el festival de cine independiente, que se realiza en Park City, en las montañas de Utah (oeste de Estados Unidos).

La película, muy emotiva, sigue los esfuerzos de Dan Cohen, fundador de la asociación Música y Memoria, para convencer a los hogares de ancianos estadounidenses de los beneficios de la música en los pacientes que sufren demencia y Alzheimer.
Para sorpresa del los cuidadores de estos centros, el documental muestra cómo, con auriculares y reproductores de música, los pacientes encerrados en su mutismo y perdidos en el laberinto de la demencia senil parecen recuperar algunos recuerdos y sentimientos al escuchar la música que les gusta.
El experimento, realizado ante cámaras, es impresionante y muchos pacientes comienzan a hablar, sonreír, cantar, e incluso a esbozar pasos de baile ante sus atónitas familias, al escuchar el jazz de su juventud o de sus primeros coqueteos. “Esto no es una cura” , dijo Rossato-Bennett. “No hay forma de recuperar las células (nerviosas), que han sido destruidas. Es como si los lugares donde se almacenan los recuerdos se hubieran ido para siempre”. Pero la música, a diferencia de otras emociones, tiene la capacidad de penetrar en los rincones del cerebro menos afectados por la demencia, que actualmente sufren cinco millones de estadounidenses.
Más melodías, menos medicamentos
Según Rossato-Bennett, esta terapia musical puede contribuir a resolver un problema social creciente. “En 10 a 15 años, si no hacemos nada, tendremos que duplicar el número de camas en los hogares de ancianos en Estados Unidos”, señaló el cineasta. “Pero apenas podemos pagar las camas existentes. Duplicarlas llevaría a la quiebra a este país.
La gente va a tener que vivir en su casa más tiempo” y la música puede ayudar.
“Cuando uno tiene Alzheimer, el mundo se vuelve abrumador, uno ya no puede distinguir lo que está sucediendo dentro y fuera suyo. Vivir se convierte en una agresión”, dijo. “Pero cuando se le da a alguien algo que le gusta, como la música de su juventud, el mundo se reduce al instante” y se vuelve menos amenazante.
La música permite así disminuir la ansiedad del paciente sin tener que recurrir a medicamentos. Porque más allá de la música, lo que aborda el film es la cuestión más general de la suerte de las personas mayores. “El tema clave está en las pastillas que esta gente toma. Su torrente sanguíneo es el más sobremedicado del planeta. No hay seres humanos en este planeta con más drogas en su cuerpo”.
Y es más fácil entrar en un hogar de ancianos con un nuevo medicamento que con un reproductor de música digital… “Vivimos en una época, en una cultura, en la que ya no estamos muy seguros de cuánto nos preocupamos por los seres humanos.
Nos preocupamos por la industria, el progreso, el comercio. Pero tal vez los ancianos ya no sirven. Y si uno vive en una sociedad donde todo es eficiencia y productividad, ¿qué pasa con los que ya no sirven?”.
Según Rossato-Bennett, la humanidad está en un punto de inflexión. “Con la tecnología, somos dioses. Realmente creo que necesitamos repensar casi todo, y al final, no tendremos opción. Porque si estamos creando el calentamiento global, si estamos agotando la peces de nuestros océanos, si nuestros mayores no están teniendo una vida digna, en algún momento no podremos ignorarlo. Y cambiaremos”, dijo.

Fuente: http://www.elcomercio.com/salud/Alzheimer-salud-demencia-adulto_mayor-documental-musica-ancianos_0_1069693229.html